RECEPCIÓN CLÁSICA EN LA ARQUITECTURA LITUANA

Recientemente he tenido la gran suerte de poder visitar Lituania en un viaje de prensa, por ello esta semana os voy a presentar algunos datos de este país relacionados con el mundo clásico. ¡Comenzamos! 

Por si no lo sabes, Lituania se sitúa al noreste de Europa, en el Báltico. Los romanos no llegaron hasta allí, pero a pesar de ello se pueden ver elementos clásicos en su capital Vilna y en Kaunas, la segunda ciudad más importante del país. ¿A qué se debe esto? 

Se debe a su arquitectura, pues muchos edificios presentan columnas, pórticos y frontones a la manera de los templos clásicos. Lituania es un país que ha sido muy castigado por las guerras y se ha tenido que reconstruir en numerosas ocasiones, en especial en los últimos siglos XIX y XX, y en estos siglos la corriente clasicista e historicista eran las que imperaban en el arte, trayendo de nuevo el arte clásico, a los edificios en especial. 

Además, este estilo de arquitectura que evoca al arte clásico fue especialmente empleado en aquellos países con regímenes totalitarios -la Alemania de Hitler, la Italia de Mussolini, Rusia-, pues para sus gobernantes este arte estaba asociado a los grandes emperadores de la Antigua Roma y al poder que ostentaban, así ellos también construían sus edificios bajo este estilo y proyectaban al pueblo su poder. 

Lituania en el siglo XIX fue anexionada al Imperio Ruso y estuvo bajo el mando de sus gobernantes, posteriormente se declaró como independiente, pero volvió a estar bajo el control soviético. Es por ello por lo que en las ciudades del país se pueden contemplar edificios con arquitectura clasicista, pues fueron construidos bajo el gobierno ruso en el país siguiendo las directrices que hemos mencionado anteriormente. 

En Vilna, la capital del país, destacan entre otros: el Palacio Presidencial, el Pramogu bancas, la Sociedad Nacional Filarmónica de Lituania o la puerta de la Aurora, entre otros.