LOS ARCOS DE TRIUNFO DE LA ANTIGUA ROMA

Al hablar de la corona de laurel mencionamos los triunfos militares, por ello hoy vamos a hablar de los arcos de triunfo. 

Los arcos se encuentran entre la escultura y la arquitectura y su finalidad era propagandística y se enriquecían con relieves que complementaban su mensaje. 

Su origen se encuentra en la época de la República romana en la que cuando un general obtenía una importante victoria militar, el Senado en su nombre y en el del pueblo de Roma podía concederle un triunfo, honor que celebraba con un espectacular desfile del general con sus tropas, los prisioneros de guerra y el botín obtenido. Con motivo de esa ceremonia se solía erigir un arco de madera, bajo el cual pasaba la comitiva. 

En la etapa del Imperio los arcos pasaron a ser de piedra y con carácter permanente para que se recordara siempre la victoria del emperador en este caso. Además, en esta época los arcos no solo conmemoraban victorias, sino también como recuerdo de la muerte del emperador. 

Los arcos podían ser de un solo vano como el Arco de Tito en Roma o de tres vanos como el Arco de Constantino, en Roma también, que tiene dos arcos pequeños flanqueando al vano grande. 

Los vanos de los arcos solían tener arcos de medio punto. Suelen tener una inscripción conmemorativa y algunos, como el de Constantino, cuentan también con relieves de esculturas. 

También había arcos que se usaban para el límite entre dos territorios y podían tener la forma de un templete. 

¿Qué arcos de triunfo romanos conoces? Cuéntame en comentarios.